Hace mucho tiempo que quería escribir un post sobre la Peatonal Lavalle, sin dudas la segunda en importancia luego de la Peatonal Florida, sobre la que he escrito en reiteradas oportunidades.
La Peatonal Lavalle es caminada por unas 180.000 personas cada día (Florida supera el 1.000.000) y si bien está casi excluída o con poca relevancia en los circuitos turísticos, sigue siendo mágica, con ese atractivo inexplicable que tienen los fenómenos populares traspolados hacia una calle peatonal de una ciudad como Buenos Aires, que resulta sumamente atractiva a los ojos y bolsillos de turistas y locales.
Escribo esta nota en español porque siempre es bueno volver a las raíces y porque la otrora famosa “Calle de los Cines”, además de ser reconocida sobre todo en Argentina, Latinoamérica y España, es además, el gran comienzo de mi desarrollo como empresario, mis raíces.
Me establecí en Lavalle en 1991, dos años después que hicieran base dos de mis tres socios y sin dudas era otra época, la gente aún se caía literalmente dentro de los restaurantes, 17 salas de cine (Paramount, Atlas, Normandie,, Ambassador, Monumental, Ocean, Iguazú, Luxor, Sarmiento, Trocadero, entre las más grandes y conocidas) con capacidades entre 800 y 3500 personas concentradas en 400 metros, hacían casi imposible recorrerla desde Carlos Pellegrini hasta Florida en menos de 30 minutos, sobre todo cuando salían las mareas humanas de los cines.
Un sábado a la noche entre los cines, la gente que sólo caminaba, los turistas en los hoteles y los teatros de Corrientes (Gran Rex, Ópera, Tabaris, Astros y Maipo sobre la calle Esmeralda, El Nacional no había reabierto luego del incendio) había unas 70.000 personas en todo momento en busca de diversión y de buenos restaurantes.
La Estancia o el El Palacio de la Papa Frita junto a confiterías como El Reloj o Le Caravelle (quizás el mejor lugar para tomar café al paso en Buenos Aires) ya eran verdaderos clásicos a los que se sumaban nuestros emprendimientos que empezaban a marcar una época. La Casona del Nonno de amigos muy trabajadores en Lavalle 827 y la Parrilla El Gaucho en Lavalle 876, hoy también son verdaderos clásicos que a lo largo del tiempo debieron atravezar y consolidarse en la peor época que vivió la peatonal.
Desde 1993 a 1999 comenzó un proceso de decadencia que produjo el cierre de casi todas las salas de cine, hoy sólo existen el Complejo Monumental, Atlas Cines y Electric, aunque cabe acotar que sigue habiendo la misma cantidad de pantallas de las épocas doradas, aunque en salas más reducidas y completamente remodeladas.
Un Bingo, un templo evangelista, galerías irreproducibles, además de delincuentes de poca monta, prostíbulos paupérrimos y toneladas de basura eran la postal cotidiana, Fabián Bielinsky retrató a la perfección a esta fauna urbana en su ópera prima "9 Reinas", la gente huía de Lavalle y como contrapartida surgían nuevos polos gastronómicos (La Recova de Posadas, Puerto Madero, Las Cañitas, en ese orden) y las propuestas se atomizaban cada vez más en Shoppings y complejos de cine que se encontraban en las antípodas de las viejas salas del centro.
En 2000 viajé 2 veces a los Estados Unidos motivado por una idea que me desveló y que había sido la recuperación para algunos milagrosa (para mí tuvo más que ver con el sentido de la oportunidad y el costo de la misma, la visión política y comercial y el tomar el riesgo de una inversión sideral) de South Beach, en Miami, Florida.
Fui asesorado y documentado y con todo ese bagage y a riesgo propio y de mis socios decidí transformar a la Peatonal Lavalle en la PEATONAL LAVALLE, un Centro Comercial A Cielo Abierto.
Junto a un grupo de amigos de la Universidad de Palermo (María Esther Santini, Natalia Canillas y Ezequiel Borsato), delineamos una estrategia aplicable a edificios, comercial y de posicionamiento marcario.
Fueron 6 meses de trabajo que produjeron 15 horas de video editado, 9000 encuestados y 400 fotografías, además de los cientos de carpetas, CD´s y presentaciones que se elaboraron para las distintas ponencias, además de la marca que habíamos ideado.
En la primer reunión logré convocar en uno de nuestros restaurantes a 180 personas entre comerciantes, personalidades del GCBA, del Gobierno Nacional y vecinos.
El proyecto había prendido en la gente, Lavalle era la gente que la caminaba una y otra vez, esa fue siempre su impronta.
Ese día decidimos junto a los señores Norberto y Gabriel Feldman (Propietarios del Complejo Monumental y cine Electric) constituir la Asociación Peatonal Lavalle NuevaMENTE , con el señor Norberto Feldman en la presidencia, puesto que era inaudito que dos veinteañeros se “apropiaran” de una calle cuyo dueño siempre fue la clase media argentina.
Para el mes de Abril de 2003 nuestra idea se convertía en el primer proyecto de inversión público-privado en la ciudad de Buenos Aires, que involucraba al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a nuestra Asociación y contaba con el apoyo de CAME y FECOBA, comenzando con la prueba piloto en las dos cuadras comprendidas entre Maipú y Suipacha. Esto decían los medios en esa época Clarín, La Nación
Actualmente el proceso continúa y en meses más quedará concluído, la Peatonal Lavalle ha vuelto a brillar, con otro brillo, los turistas la recorren azorados, se habla spanglish y portuñol, los cines vuelven a encender sus neones devenidos en fibra óptica, los teatros están casi siempre sold out, incluso calles como Suipacha, en donde se encuentra el Almacén Suipacha o Tucumán, donde se encuentra Hostel Colonial el dueño de este blog, han recobrado nuevos bríos comerciales.
Lavalle, late, vive, nunca se fue, siempre estuvo ahí, siempre se vuelve a esta calle, gran parte de mi vida transcurre en ella, los invito a conocerla, a recorrerla, es una gran experiencia, aquellos que me conocen saben que así lo siento, que más allá del restaurateur exitoso, del dueño de Hostel Colonial y de la persona que uno puede ser, siempre voy a ser una parte de esta calle.
La Peatonal Lavalle es caminada por unas 180.000 personas cada día (Florida supera el 1.000.000) y si bien está casi excluída o con poca relevancia en los circuitos turísticos, sigue siendo mágica, con ese atractivo inexplicable que tienen los fenómenos populares traspolados hacia una calle peatonal de una ciudad como Buenos Aires, que resulta sumamente atractiva a los ojos y bolsillos de turistas y locales.
Escribo esta nota en español porque siempre es bueno volver a las raíces y porque la otrora famosa “Calle de los Cines”, además de ser reconocida sobre todo en Argentina, Latinoamérica y España, es además, el gran comienzo de mi desarrollo como empresario, mis raíces.
Me establecí en Lavalle en 1991, dos años después que hicieran base dos de mis tres socios y sin dudas era otra época, la gente aún se caía literalmente dentro de los restaurantes, 17 salas de cine (Paramount, Atlas, Normandie,, Ambassador, Monumental, Ocean, Iguazú, Luxor, Sarmiento, Trocadero, entre las más grandes y conocidas) con capacidades entre 800 y 3500 personas concentradas en 400 metros, hacían casi imposible recorrerla desde Carlos Pellegrini hasta Florida en menos de 30 minutos, sobre todo cuando salían las mareas humanas de los cines.
Un sábado a la noche entre los cines, la gente que sólo caminaba, los turistas en los hoteles y los teatros de Corrientes (Gran Rex, Ópera, Tabaris, Astros y Maipo sobre la calle Esmeralda, El Nacional no había reabierto luego del incendio) había unas 70.000 personas en todo momento en busca de diversión y de buenos restaurantes.
La Estancia o el El Palacio de la Papa Frita junto a confiterías como El Reloj o Le Caravelle (quizás el mejor lugar para tomar café al paso en Buenos Aires) ya eran verdaderos clásicos a los que se sumaban nuestros emprendimientos que empezaban a marcar una época. La Casona del Nonno de amigos muy trabajadores en Lavalle 827 y la Parrilla El Gaucho en Lavalle 876, hoy también son verdaderos clásicos que a lo largo del tiempo debieron atravezar y consolidarse en la peor época que vivió la peatonal.
Desde 1993 a 1999 comenzó un proceso de decadencia que produjo el cierre de casi todas las salas de cine, hoy sólo existen el Complejo Monumental, Atlas Cines y Electric, aunque cabe acotar que sigue habiendo la misma cantidad de pantallas de las épocas doradas, aunque en salas más reducidas y completamente remodeladas.
Un Bingo, un templo evangelista, galerías irreproducibles, además de delincuentes de poca monta, prostíbulos paupérrimos y toneladas de basura eran la postal cotidiana, Fabián Bielinsky retrató a la perfección a esta fauna urbana en su ópera prima "9 Reinas", la gente huía de Lavalle y como contrapartida surgían nuevos polos gastronómicos (La Recova de Posadas, Puerto Madero, Las Cañitas, en ese orden) y las propuestas se atomizaban cada vez más en Shoppings y complejos de cine que se encontraban en las antípodas de las viejas salas del centro.
En 2000 viajé 2 veces a los Estados Unidos motivado por una idea que me desveló y que había sido la recuperación para algunos milagrosa (para mí tuvo más que ver con el sentido de la oportunidad y el costo de la misma, la visión política y comercial y el tomar el riesgo de una inversión sideral) de South Beach, en Miami, Florida.
Fui asesorado y documentado y con todo ese bagage y a riesgo propio y de mis socios decidí transformar a la Peatonal Lavalle en la PEATONAL LAVALLE, un Centro Comercial A Cielo Abierto.
Junto a un grupo de amigos de la Universidad de Palermo (María Esther Santini, Natalia Canillas y Ezequiel Borsato), delineamos una estrategia aplicable a edificios, comercial y de posicionamiento marcario.
Fueron 6 meses de trabajo que produjeron 15 horas de video editado, 9000 encuestados y 400 fotografías, además de los cientos de carpetas, CD´s y presentaciones que se elaboraron para las distintas ponencias, además de la marca que habíamos ideado.
En la primer reunión logré convocar en uno de nuestros restaurantes a 180 personas entre comerciantes, personalidades del GCBA, del Gobierno Nacional y vecinos.
El proyecto había prendido en la gente, Lavalle era la gente que la caminaba una y otra vez, esa fue siempre su impronta.
Ese día decidimos junto a los señores Norberto y Gabriel Feldman (Propietarios del Complejo Monumental y cine Electric) constituir la Asociación Peatonal Lavalle NuevaMENTE , con el señor Norberto Feldman en la presidencia, puesto que era inaudito que dos veinteañeros se “apropiaran” de una calle cuyo dueño siempre fue la clase media argentina.
Para el mes de Abril de 2003 nuestra idea se convertía en el primer proyecto de inversión público-privado en la ciudad de Buenos Aires, que involucraba al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a nuestra Asociación y contaba con el apoyo de CAME y FECOBA, comenzando con la prueba piloto en las dos cuadras comprendidas entre Maipú y Suipacha. Esto decían los medios en esa época Clarín, La Nación
Actualmente el proceso continúa y en meses más quedará concluído, la Peatonal Lavalle ha vuelto a brillar, con otro brillo, los turistas la recorren azorados, se habla spanglish y portuñol, los cines vuelven a encender sus neones devenidos en fibra óptica, los teatros están casi siempre sold out, incluso calles como Suipacha, en donde se encuentra el Almacén Suipacha o Tucumán, donde se encuentra Hostel Colonial el dueño de este blog, han recobrado nuevos bríos comerciales.
Lavalle, late, vive, nunca se fue, siempre estuvo ahí, siempre se vuelve a esta calle, gran parte de mi vida transcurre en ella, los invito a conocerla, a recorrerla, es una gran experiencia, aquellos que me conocen saben que así lo siento, que más allá del restaurateur exitoso, del dueño de Hostel Colonial y de la persona que uno puede ser, siempre voy a ser una parte de esta calle.
Esto pasa en la Peatonal Lavalle
10 comments:
Recuerdo cuando te vi por primera vez y te parecías más a un rock star que al señor empresario que sos hoy, había algo de vos que nos deslumbraba. Carisma infinito y esa convicción del que hace las cosas con el cerebro, el corazón y las tripas. Sos un gran hacedor y el tiempo dará la razón, no sólo Lavalle, Buenos Aires se merece tipos como vos. Brindo por ello y por la suerte de haberte conocido Jorge Ferrari, sin dudas un señor de Lavalle.
Simplemente me emocionó lo que escribió. Gracias.
La primera vez que camine Lavalle fue en el año 96, y no tuve un buena impresión. De noche era un lugar que no era recomendable transitar. Quedo esa imagen en mi retina, hasta hace dos semanas que volví a caminarla. Todavia tenia la mala imagen de esa época, y me di cuenta que no era la misma peatonal de aquellos tiempos. La proxima visita veré con otros ojos esa calle. Las cosas van a tener otro sentido despues de leer este post. Saludos
Mucha gente, muchísima, sabe todo lo que trabajaste y la cantidad de puertas que patearon con Gabriel para ocupar el lugar que correspondía y que por derecho propio se merecían. Hicieron mucho ruido que se vengan las nueces.
Me encanto... quién iba a decir que los caminos del blog y las buenas intenciones (tomate vip) y me llevaria a darme cuenta de la historia que sos... gracias por compartirla me encanto... SR LAVALLE :) Exitos siempre!!
En otra época fueron los tangueros, los bohemios, los intelectuales, los dueños del centro, como vos decís, la clase media argentina, hoy todo es más complejo, ya nadie se cae adentro de ningún local comercial. Haber repensado una calle - emblema, reposicionarla y sólo observar como se mueve tu organización, tu trabajo y tu rebeldía hacia el sistema insertándote en él y sacándole la lengua, hacen que seas digno de mi más profunda admiración. C.
Lloré y qué, me emocionan muchas de las cosas que hacés, te lo dije el día que abriste el Almacén Suipacha y te lo repito ahora. Hace más de 15 años, cuando Fer y Carlitos(otros 2 talentos y Luisito también) nos presentaron, eras flaquito como un papel y yo no hubiera apostado 2 mangos por vos, con esa imagen desgarbada, los pelos largos y esa cara de hambre(lo había en todos los sentidos posibles). Me equivocaba, porque con el tiempo me di cuenta que había conocido a uno de los tipos más brillantes con los que tuve la suerte de tratar.
Vos y los chicos son siempre referentes para todos mis clientes y para Bodegas La Rural. Hoy ya no sos tan flaquito(buena señal) y de pelo ni hablar, pero seguís siendo ese tipazo que aprendí a querer. Es un placer poder caminar tu calle peladín. Horacio
Muy interesante su idea de intervención urbana, me gustaría contactarlo, lo haré por mail para poder hacerle una nota sobre el tema. Saludos
Hola Jorge!!! Como estas?
De casualidad llegue a ese articulo de Peatonal Lavalle y la verdad es que quede super sorprendida.
Y despues de leerlo es inevitable volver a ese momento y experimentar todo de nuevo.
Espero que todo este super bien por ahi y que sigas acumulando exitos!!!
Besos a la flia!!!
Mare (Esther)
La historia de una calle se junta con la historia de vida de un tipo de esos que quisiera tener de amigo para disfrutar cada momento, vaya historia.
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